NOTA – Esta revisión puede contener spoilers.
En otro intento de llevarnos Al pasado, ‘Los Simpson’ logra regalarnos un episodio sobre algunos de los artistas más famosos de todos los tiempos, con todos los juegos de palabras y referencias que puedes esperar de nuestra familia animada favorita.
Durante los dos primeros episodios de la temporada, el programa se mantuvo alejado de su uso típico de múltiples narrativas, centrándose en el Sr. Burns y Homer en sus respectivas historias. Esta semana, sin embargo, tenemos tres (técnicamente, cuatro) historias diferentes agrupadas en media hora.
En el papel, este concepto suena bien. Tenemos a la familia vistiendo parodias de artistas famosos; Lisa es Leonardo da Vinci, Bart es el Zorro, Homer y Marge interpretan a Diego Rivera y Frida Kahlo, y Moe se convierte en Vincent van Gogh. Sin embargo, a pesar de las grandes esperanzas, tener tantas historias desconectadas en un episodio resulta ser bastante torpe para un programa que está tan acostumbrado a tener una narrativa más ágil.
Aunque FOX La comedia está acostumbrada a tener múltiples tramas dentro de su corto espacio de tiempo, esta semana se maneja de manera ligeramente diferente ya que cada acto contiene su propio comienzo, medio y final para un hilo de acción único. El problema aquí es que todo se siente apresurado, y cuando termina un acto, y se produce una pausa publicitaria, tenemos muy pocas razones para mantenernos enfocados, ya que no se nos da el tiempo suficiente para invertir en cada una de las historias.
Cuando se trata de un episodio como este que está tan centrado en referencias y bromas particulares, la historia tiende a sufrir. Y al crear tres historias completamente diferentes, eso hace que el programa sea aún menos agradable de seguir.
El episodio en general no es terrible, ya que hay algunos momentos divertidos, particularmente el final, pero carece de impulso y propósito. Al igual que la semana pasada, parece que esta temporada no está comenzando tan fuerte como su estreno, ya que las historias se sienten planas y olvidadizas al configurarse para ser algo que no pueden cumplir.
‘Los Simpson’ funciona mejor cuando permite que sus historias tengan corazón y propósito, en lugar de un tema centrado en referencias y bromas rápidas. ‘Now Museum, Now You Don’t’ tiene sus momentos, pero en general no logra entregar nada sustancial.